"La Palabra era luz verdadera que alumbra a todo hombre. Al mundo vino y en el mundo estaba; el mundo se hizo por medio de ella, y el mundo no la conoció. Vino a su casa y los suyos no la recibieron. Pero a cuantos la recibieron les da poder para ser hijos de Dios, si creen en su nombre" (Jn 1,9-12)
Un año más la Navidad nos envuelve. Y las canciones. Y las luces. Y los regalos envueltos en papel de colores. ¿Por qué no regalar algo distinto, sin envoltorios, que sirva para desnudar el corazón, que valga para estos días y para todos los días del año?
Podemos pensar en alguna persona concreta. ¿Qué le regalaríamos de todo esto? ¿Qué otros regalos similares podríamos hacer?
¿Y qué regalaríamos a Jesús que nace? ¿Y a todos los Jesús que pasan necesidad (niños que mueren de hambre, en la guerra, en soledad?
Hoy te regalo...AMISTAD, para que, cuando tu alma añore un amigo,
sin pensarlo busques, y ese alguien corra a tu lado.
Hoy te regalo... SONRISAS, para que cuando tus lágrimas
escurran tras la cascada de tu mejilla en un día gris,
sean las risas las que iluminen tus tristezas.
Hoy te regalo... GRANDES SUEÑOS,
para que, cuando en tu mente exista un vacío,
sean aquellos bosques cubiertos de invierno
los que atrapen la atención de tu pensamiento.
Hoy te regalo... LA FUERZA DE UNAS MANOS,
para que, cuando tus tobillos se cansen,
los hombros de alguien te sirvan de fuerza al andar.
Hoy te regalo... UN RAMO DE ABRAZOS,
para que, cuando los tropiezos te dificulten el andar,
sean los ánimos una esperanza que te ayuden a continuar.
Hoy te regalo... UNA ESTRELLA JOVEN
para que, cada vez que el sol descanse,
sea esa fiel luz la que te acompañe.
Hoy te regalo... un pedacito de HUMILDAD
para que, cuando los éxitos engrandezcan tu persona,
sea la sabiduría el aire mágico que te haga valorar
lo que otros desprecian al llegar a una nueva orilla.
Hoy te regalo... MI CARIÑO SINCERO
para que cuando sientas que nadie te acompaña,
recuerdes que en paisajes verdes o valles áridos
mi pensamiento siempre te lleva de la mano.
Hoy te regalo... UN ABRAZO INMENSO
para que, cuando necesites sentir tus fuerzas
sean ellos el puerto de tus emociones.
Hoy te regalo... un PAR DE LÁGRIMAS
para que se alberguen entre tu alma y corazón;
así, si en algún segundo la soberbia daña tu andar, sea una muestra
de sensibilidad ajena la que te ayude a no cometer injusticias.
Hoy quiero obsequiarte.. lo MÁS BELLO que puedas recibir
mientras transformas estas líneas en un espejo
donde la ternura que aquí encuentres y la belleza que aquí nazca,
te dé la certeza de que no estás solo/a, que alguien te acompaña.
¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!
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